Con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, con motivo del discurso ofrecido en la Asamblea General, el 2 de octubre de1998.

LISTA DE CHEQUEO PARA EL DECISOR EN JEFE

Los 10 pasos para tomar decisiones acertadas en circunstancias críticas.

Sobre la naturaleza del problema:

  1. ¿Problema o dilema? ¿Estoy frente a un problema (que puede ser resuelto sin crear consecuencias negativas perturbadoras) o a un dilema (que solo puede ser resuelto creando otros grandes proble­mas)? Estoy fatalmente forzado a elegir entre ambas opciones.
  2. ¿Antes de la hora 24, en la hora 24 o en la hora 25? ¿En qué hora nos encontramos? ¿En una hora cualquiera, en la hora 24 (que es la última hora en que podemos actuar para evitar un proceso nefasto e irreversible) o ya hemos entrado en la hora 25 (que no es la última hora, sino una hora después de la última, cuando ya se ha desatado un proceso irreversible)?
  3. ¿Nudo normal o nudo gordiano? ¿Es el dilema un nudo normal (que puede ser desatado con habilidad y cuidado) o un nudo gordiano (que no se puede desatar y hay que cortar de un tajo)?
  4. ¿Mira Jano al pasado o al futuro? ¿Cuál de las dos caras de Jano prevalecerá en mi decisión? ¿La que mira hacia las experien­cias del pasado o la que explora las posibilidades del futuro?
  5. ¿Aprueba o reprueba el test del Cu-Co? ¿Resulta el nuevo paradigma cu-lturalmente co-mpatible con la realidad en que se va a aplicar o es un modelo externo y foráneo, cu-lturalmente inco-mpatible con la cultura en el que se pretende implementar?
  1. ¿Autoridad o liderazgo adaptativo? ¿Actúo solamente como un experto que ofrece dirección, protección y orden porque conoce los problemas y las soluciones (actúo como autoridad) o avanzo más y lidero un proceso adaptativo (reconozco los intereses de todas las facciones y orquesto sus interacciones para tomar el riesgo de explorar nuevos problemas y nuevas soluciones (actúo como líder)?
  2. ¿Ideas generales y problema difuso; o ideas concretas, problema bien definido, objetivos de solución y plan de acción específico? ¿Tengo una visión de conjunto, imprecisa y aproximada de lo que quiero solucionar, o he logrado definir el problema al contestar a las “preguntas periodísticas” (quién, qué, cuándo, dónde, cómo y cuánto) a las que he añadido las preguntas de fondo (por qué, para qué y con qué) y las de evaluación (cómo mido los avances y el éxito)?
  3. ¿Ajustes simples al paradigma tradicional o nuevo paradigma? ¿Intento solucionar el dilema con soluciones tradicionales cuya vida útil ha expirado o ensayo un nuevo modelo para redefinir el dilema y sus posibles soluciones?

Sobre la naturaleza de mi decisión personal:

  1. ¿Acto de coraje o de cobardía? ¿Mi decisión obedece a mi “sereno juicio” y me permitirá ‘dormir’ bien porque nace de mi naturaleza, de mi formación y de mis experiencias, u obe­dece a un análisis superficial motivado por la presión social, el afán o la amenaza?
  1. ¿Estoy listo o debo esperar? ¿He logrado llegar al punto de con­vicción que me prepara para recibir con serenidad y entereza las críticas que recibiré por mi decisión? ¿Al punto en el que, como dice el Si de Rudyard Kipling, “no puedan herirme ni amigo ni enemigo”? ¿O estoy aprisionado por la incertidum­bre, fracturado por la desconfianza y paralizado por las dudas ante la decisión que estoy a punto de tomar?